Nació en Andalucía (España). Cantante y actriz, conocida por los santafereños como La Zebollino o La Cebollino. Como suele ocurrir con divas de antaño y con algunas de la actualidad, su historia se confunde con la leyenda. María de los Remedios llegó a la Nueva Granada a finales del siglo XVIII con su esposo, el ingeniero Eleuterio Zebollino, teniente coronel, y con su hermano Francisco de Paula Aguilar, quien se casaría posteriormente con Teresa Suárez en Santafé.

Los primeros cronistas del teatro bogotano coinciden en las cualidades artísticas y en la belleza de La Zebollino. Por ejemplo, Juan Francisco Ortiz escribió: “Sea porque los recuerdos de la juventud son tan agradables, o por cualquier otro motivo, lo cierto es que los que conocieron a La Zebollino pretenden que en materia de canto no se ha oído hasta la fecha nada comparable a las tonadillas y canciones de la agraciada andaluza”. Por su parte, José Vicente Ortega Ricaurte escribe que era una “mujer de muchas gracias, alta y delgada, hermosísimos ojos azules, cabellera rubia, blanquísima tez y perfecta en sus formas”.

En lo que no coinciden las fuentes es en el destino de María de los Remedios después de la Independencia. Juan Francisco Ortiz dice que la pareja Cebollino regresó a España poco antes de los acontecimientos de 1810, y que un día de revuelta política en España “tuvo la imprudencia de asomarse a los balcones de su casa a poner una bandera”, con el objeto de apoyar a sus copartidarios y “un disparo de aquellos acoquinados batalladores arrebató a La Zebollino su preciosa dentadura. La bala le lastimó las mejillas y destrozó aquel envidiado cerco de perlas, desfigurándola para toda la vida”.

Otras fuentes señalan que La Zebollino se unió a las luchas de independencia con su hermano Francisco de Paula Aguilar, en el bando contrario al de sus compatriotas, los realistas. Durante el periodo denominado del "terror", su hermano fue fusilado por Pablo Morillo en 1816, su esposo encarcelado en Puerto Cabello y ella sometida al destierro y confinamiento en el pueblo de Cogua (Cundinamarca), a donde fue conducida a pie en julio de 1816. Sin embargo, según algunos documentos, el teniente coronel Eluterio Cebollino figura en una lista de militares que componían una junta, cuando se nombró a José I Bonaparte, como rey constitucional bajo el Estatuto de Bayona. Por tanto, es factible que la pareja Cebollino si hubiese regresado a España antes de 1810, y la desterrada hubiese sido la esposa de Francisco de Paula, Teresa Suárez.

A Luis A. Cuervo perteneció la miniatura dibujada por el pintor granadino José Pío Domínguez de La Cebollino, elaborada sobre marfil, y que en la actualidad forma parte de la colección de la Biblioteca Nacional. Cuervo le comentó a Ortega Ricaurte que los cronistas se volvían “lenguas al ponderar el donaire de la agraciada andaluza”, y afirmaban que “jamás se oyó una voz más dulce en el coliseo de Santa Fe”.