Nació en Ibagué en 1935 y murió en Bogotá el 10 de julio de 2020. Conocido en el medio teatral con el sobrenombre afectuoso de Piyó. Actor y miembro fundador del Teatro La Candelaria.
Mendoza escribió una sucinta biografía para el libro El Teatro La Candelaria y el movimiento teatral en Bogotá 1950- 1991, publicado en 2013. Inició su escrito así:
“Soy Fernando Emeterio Mendoza López y desde la adolescencia me dicen Piyó, no porque tenga algún ancestro francés, sino por ser un indio Pijao, auténtico, del Tolima. Nací en Ibagué el 20 de abril del año 1935 cuando las campanas de la Catedral estaban sonando Pascua. Soy bachiller del Instituto Nicolás Esguerra, estudié algo de arquitectura en la Universidad de América y mucho menos de Geología en la Universidad Nacional, he pintado dos óleos y dibujado cinco carboncillos; he escrito algunos cuentos y poemas… El teatro me atrapó con toda su intensidad en combate contra la timidez; y a pesar del autismo, he logrado permanecer en el grupo desde su primera obra, hace ya, más de cuarenta y cinco años. Cuando vi Galileo Galieli en el Teatro Colón, de Bogotá, sentí que el proyecto de mi vida estaba en ingresar a un grupo como ese… Cuentos, talleres, invenciones, ensayos, presentaciones, análisis, desde entonces es el grupo que ha fertilizado mi existencia, he trabajado en casi todas las obras por América, el Caribe, Europa y una película en Finlandia”.
Formó parte de la agrupación Teatro Experimental Ohel, creado en 1956 y dirigido por Abraham Zalzman. Como estudiante universitario trabajó bajo la dirección de Víctor Muñoz Valencia, destacado por su labor como libretista en el radioteatro de la Radiodifusora Nacional de Colombia, y como traductor y adaptador de obras para el Teatro El Búho. Tuvo vínculos artísticos con el director de televisión Bernardo Romero Lozano en los llamados “teleteatros”. Actor en las obras del Teatro Experimental de la Universidad Nacional, dirigidas por Dina Moscovici, Enrique Pontón, Fernando Corredor y Víctor Muñoz.
En 1966 fundó la Casa de la Cultura —hoy Teatro La Candelaria— junto con los maestros Santiago García, Patricia Ariza, Carlos José Reyes, entre otros integrantes. Soldados, obra basada en la novela La casa grande, de Álvaro Cepeda Samudio, no solo fue el primer montaje de la agrupación, sino el inicio de Fernando Mendoza en la construcción de una larga lista de personajes, que interpretó dentro de la agrupación teatral. Fueron más de cincuenta montajes en los que Mendoza participó, durante los más de 54 años de vida que, hasta la fecha de la muerte de Mendoza, lleva activa la agrupación.
Mendoza ha sido coautor en los procesos de creación colectiva y actor en las obras del Teatro La Candelaria. Entre sus títulos se hallan los siguientes: Guadalupe años sin cuenta (1975), Los diez días que estremecieron al mundo (1977), Diálogo del rebusque (1981), La trasescena (1984), El paso (1988), La trifulca (1990), El Quijote (1999), Antígona (2006), Camilo (2015), Refracción; De caos y de cacaos dirigida por Santiago García; Camilo dirigida por Patricia Ariza, estrenada en el 2015, Mientras no se apague el sol (2018), son algunas de las obras de las que Piyó hizo parte.
Hoy su historia se confunde con la del Teatro La Candelaria, del cual fue integrante desde la edad de 31 años. Hombre callado, observador, disciplinado, y como lo describe Patricia Ariza “un actor impecable en su ejercicio escénico… Se le ve casi todo el tiempo silencioso, pero entregado en cuerpo y alma al teatro”. Así fue Fernando “Piyó” Mendoza, quien partió para encontrarse con otros de sus colegas y su gran director, Santiago García, que murió el 23 de marzo de 2020.